Texto
I:
1 pregunta: Señale
alguna producción literaria, cinematográfica o de otro tipo que
cuente una experiencia laboral en el extranjero o en un ambiente
hostil y comente sus semejanzas y diferencias con Estupor
y temblores.
Buscando
el norte: Álex
y Carol son dos hermanos que, hartos de la situación laboral en
España, deciden emigrar a la ciudad europea de las oportunidades:
Berlín. Su ilusión por realizar el sueño alemán pronto se
convierte en una pesadilla cuando se dan cuenta de que han pasado de
vivir por encima de sus posibilidades a vivir por debajo de ellas.
Los dos hermanos serán el hilo conductor para conocer a otros
españoles con distintas historias. ¿Qué pasa cuando dejas en España a tu novia pero conoces a la mujer de tu vida en Alemania? ¿O
cuándo dejas tu vida y tu carrera por seguir a tu mujer y su gran
oportunidad laboral? ¿Y cuándo te has visto obligado a dejar a tus
hijos en España y te lo juegas todo a una carta para poder darles un
futuro mejor? El choque de culturas que ocasiona la convivencia entre
personajes de diferentes procedencias y clases sociales es uno de los
detonantes de esta comedia de contrastes que se vale de la picaresca
para retratar la cruda realidad de la emigración.
Comparte
con Estupor
y temblores el
cambio de países, el choque entre culturas, como las expectativas
que tienen los protagonistas van disminuyendo a medida que pasa el
tiempo. La dureza del trabajo en países tan estrictos como lo son Alemania y Japón, en contraste con la vida más ociosa que lleva, por
ejemplo, España. Dejar a la familia atrás, que te degraden a lo más
bajo, la frialdad tanto de los japoneses como la de los alemanes, sus
grandes empresas y su gran consumismo, su gran economía. El racismo
de los alemanes hacia los españoles que nos consideran demasiado
vagos, igual que el racismo de los japoneses hacia los occidentales.
2
pregunta: Exprese
su valoración acerca de la protagonista y su comportamiento.
Ameliè
es demasiado inocente, tiene ilusión, sueños... Alberga la
esperanza de volver al país de su infancia de que la traten como una
más. Desea tanto ser japonesa que cree que lo es cuando no es así,
aunque ella se sienta japonesa, los “verdaderos” japoneses no la
tratarán como tal, aún peor, se sentirán ofendidos porque una
occidental intente imitarles. Comete errores, como todo el mundo,
comunes en occidente, fatales en oriente; preguntar demasiado, tener
iniciativa, contestar a un superior... En Europa esos actos no tiene
mayor importancia, incluso pueden ser recompensados sin embargo, en
Oriente, si no fuera una gran ofensa, sería despedido, pero ni te
despiden porque eso sería deshonroso, es peor te humillan, degradan,
te mortifican hasta el último día de contrato. Son tan consumistas
que no les importa seguir pagándote durante todo un año, de todas
formas no tendrás vida fuera de la empresa y no podrás gastar el
dinero que ganas más que en tus necesidades básicas.
Ameliè
me cae bien, es la eterna emperatriz infantil, no estaba hecha para
trabajar en una empresa de ese tipo. Ella está hecha para soñar,
para apoyar la frente en el cristal y sentir que cae.
3
pregunta: Redacte
una breve nota recomendando ( o desaconsejando) con razones, la
lectura de esta novela.
Recomendaría
esta novela, se la recomendaría a cualquiera y explicaré aquí mis
razones. La primera es que a pesar de que no es una comedia estoy
segura de que te reirás con ella, habrá frases, momentos, elementos
de este libro que no olvidarás, ya sea el chocolate verde, la
mantequilla ligera de los noventa o las interminables fotocopias. En
otras ocasiones te sentirás identificado, te lo aseguro. Y si
tuvieras mi manía de doblar cada página que contenga un frase que
quieras recordar o ponerle un posit, tendrías uno puesto cada dos
páginas. Ameliè es una escritora llena de ingenio e imaginación
que no te dejará indiferente y lo notarás desde la primera página.
Pero
también te advierto que no todo serán risas, no es solo una
historia, es una historia real, habrá momentos que se te revolverán
la tripas si te imaginas al señor Omochi gritando a sus pequeños
trabajadores y como ellos no pueden hacer nada para defenderse. Te
enfadarás con Fubuki por ser tan falsa, malvada y rastrera.
Te
la recomiendo porque sentirás muchas cosas con un solo libro,
conocerás un poco más la cultura de otro país y te abrirá la
mente y además tiene la ventaja de no ser muy largo, por todo eso te
recomiendo esta maravillosa obra literaria.
Texto
II:
1
pregunta: Cite
algunos ejemplos de creaciones culturales en que tenga presencia
significativa la burocracia y las relaciones jerárquicas y
compárelos con Estupor
y Temblores.
Citaré
pues, el caso que mejor conozco: La empresa Inditex
Inditex es la empresa en la que estuve trabajando durante cuatro meses,
aunque no es ni de lejos tan estricto como el sistema japonés, sí
que está fuertemente estructurado en una jerarquía de la que no
podrás saltarte ni un escalón. En lo más bajo del pedestal está
la ayudante de dependienta (yo) en el caso de Estupor
y Temblores sería como cuando
Ameliè estaba limpiando los baños. Es lo más bajo, estás
supeditada a las órdenes de todo el mundo sin poder replicar nada,
si alguien se pone enfermo serás tú quien lo cubra, si alguien se
va de vacaciones serás tu quien la cubra, y si hay que trabajar en
navidad y fin de año será a ti a quien le toque cerrar tienda y así tendrás que cancelar los planes que tengas para ese día,
salir tarde después de cerrar y como a esas horas ya no habrá
autobús, andar siete kilómetros hasta casa para cenar congelados y
pasar ambas noches sin ningún tipo de familiar o amigo. Por encima
estaría la dependienta (Fubuki), que es la que básicamente le va
tocar pringar a las ocho de la mañana cuando venga camión de nueva
colección. Por encima de ella, está la responsable (Saito), que es
quien hace de encargada segunda cuando está o la encargada primera no
están. Encima está la encargada segunda (Omochi) que sustituye a la
encargada primera cuando esta no está, y cuando coincidan las dos se
pasarán las horas discutiendo porque después de todo “cada
maestrillo tiene su librillo”. Tanto la encargada segunda como la
primera (Haneda) llevan uniformes diferentes para distinguirlas y
ambas se libran de hacer el trabajo sucio, que sería los cambios en
el almacén, además tienen un día libre de más. Ésta sería la
jerarquía dentro de la tienda. La jeraquía después se extiende
fuera de la tienda hasta llegar a Amancio Ortega. Curiosamente la
dependienta que tenía como mi superior inmediato también me engañó
con falsa amistad, la responsable me hablaba muy mal sin razón
alguna por órdenes de la encargada segunda con la que me llevaba
realmente mal y con la que mejor me llevaba y la más amable era la
encargada primera. Aunque como diferencia a la empresa japonesa, en
Inditex sí que se valora la iniciativa, aunque la forma de
premiarte, en mi caso, eran unos gomet que se ponían en un tablón y
de vez en cuando gominolas. No tenía una verdadera repercusión
sobre el trabajo, y los ascensos sí dependían del tiempo que llevas
en la empresa.
2
pregunta: Expresa
brevemente los sentimientos y actitudes de la protagonista en
relación con el choque cultural que vive.
La
encuentra retrógrada, machista, fría y racista. Continuamente se la
puede ver humillada por el simple hecho de ser occidental aunque ella
se sienta japonesa. Hay numerables críticas hacia este tipo de
cultura que solo quiere hacer a las mujeres infelices, donde el
suicidio se ve como algo honorable y los ciudadanos viven en total y
completa sumisión a sus jefes, donde la gente vive para trabajar en
lugar de trabajar para vivir. Los japoneses, tal y como los presenta,
no disfrutan del ocio, carecen de relaciones sociales significativas
y las relaciones laborales son inexistentes.
Texto
III
1
pregunta: Comente
la proyección del punto de vista occidental sobre otras culturas en
la literatura, el arte, el cine etc. Cite algunos ejemplos y
compárelos con Estupor
y temblores.
El
último rey de Escocia
Nicholas
Garrigan es un joven médico escocés que, buscando nuevas
experiencias, se desplaza hacia Uganda en los años setenta para
trabajar en la ayuda humanitaria. Nada más llegar debe atender a Idi
Amín, el nuevo líder del país, que ha sufrido un aparatoso
accidente al chocar su vehículo con una vaca. Este primer encuentro
fascina al dirigente y hace que Nicholas se convierta en su médico
personal. El joven se deja seducir por la cautivadora personalidad
del gobernador y pronto se convierte en su confidente más íntimo.
Pero con el tiempo Nicholas se da cuenta de que, detrás del encanto
y generosidad de Idi Amín, se esconde un sanguinario y atroz
asesino. Su intención es alejarse cuanto antes del horror que
esconde uno de los más terribles regímenes de África. Pero quizás
ya es demasiado tarde.
Nueva
York para principiantes
Basada
en la verdadera historia de un verdadero idiota, “Nueva York Para
Principiantes” es la crónica del declive de Sidney Young, un
prometedor periodista británico que un día tiene la oportunidad de
escribir en una de las revistas más prestigiosas de Nueva York,
"Sharps". Young, un fracaso total sin vergüenza, sin tacto
y sin control, se abrirá camino a través de Manhattan por los
motivos más inoportunos, y sus malos modales y sus bromas de mal
gusto le llevarán a percances monumentales con divertidas
consecuencias...
En
ambas historias se pueden ver como dos jóvenes viajan entusiasmados
a un nuevo país a trabajar en algo que les hace ilusión, igual que
en el caso de Ameliè. Y en ambos casos se llevan decepciones y nada
es tan bonito como parece en un principio, al igual que en el libro.
Por un lado, tenemos la forma más dramática de contarlo, una
historia desgarradora. Y por el otro lado, tenemos una comedia,
bastante mala y bastante tonta, pero para lo que aquí acontece es
válida.
También
creo que las cosas se ven muy diferentes si es un extranjero el que
habla de un país a, si es un nativo el que habla de este. Al igual
que la Biblia no sería igual si la hubiera escrito una mujer, el
libro de Ameliè lo hubiera escrito por ejemplo, Fubuki, las cosas se
verían completamente diferentes. Probablemente, contase la historia
de, como una mujer que lleva luchando años por un ascenso, se vio
amenazada por la presencia de una extranjera que podía robarle el
puesto. Y a la vez una mujer que no conocía las costumbres, que
tenía otra mentalidad y que le hacía perder el tiempo a todo el
mundo. Hubiera sido el libro de como cargar con una inútil durante
un año.
2
pregunta: Explique
cual es la actitud de la protagonista ante la burocracia y los
superiores y trate de imaginar cuál sería la suya propia.
Ameliè
no se siente cómoda ante esa burocracia, la critica, es un proceso
tedioso y lento para cualquier cambio, no puede tomar ninguna
decisión y todas las decisiones que toman por ella y los trabajos
que la obligan a hacer son estúpido teniendo en cuenta para qué la
contrataron en un primer momento.
Mi
actitud sería de dimitir en el primer momento en el que me obligasen
a hacer algo que no está estipulado en mi contrato, que no se
corresponde con el trabajo que tenía que hacer.
Y aunque dimitir se una deshonra en Japón, dado que yo no soy
japonesa y para ellos nunca lo seré, para mi no constituiría una
deshonra, sino un acto de amor propio.
Texto
IV
1
pregunta: Señale
alguna producción literaria, cinematográfica o de otro tipo que
cuente una experiencia de vida en un país extraño y compártela con
Estupor
y temblores.
Perdiendo
el norte Sinopsis: Hugo y
Braulio, dos jóvenes con formación universitaria, hartos de no
encontrar ni trabajo ni futuro en España, deciden emigrar a Alemania
siguiendo los cantos de sirena de un programa de televisión tipo
“Españoles por el mundo”. Pero pronto descubrirán que sobrar en
un sitio no significa ser necesario en otro y que perseguir un sueño
alemán puede tener mucho de pesadilla.
Tenemos
aquí otro caso de emigración española hacia Alemania como en el
caso de Buscando el norte
que incluso en el título se asemejan. Tanto la serie como la
película son comedias españolas que tienen diversos puntos entre
ellas, como puntos en común con el libro que aquí acontece. Ni la
serie ni la película son obras maestras ni lo pretenden, obvio no
reflejan la realidad al cien por cien incluso me atrevería a decir
que es una estratagema para que los jóvenes cualificados no salgan del país dejando a este invadido por Ninis que no ayudan nada a la
economía, pues obvio a nadie le interesa que los jóvenes que somos
el “futuro” del país y los que pagarán las pensiones en el
futuro, sean el futuro de otro y dejemos que España se hunda, pero
esa es solo mi opinión.
En
definitiva, lo que tiene en común esta película con el libro es que
muestra las dificultades de vivir y trabajar en un país extranjero
tan estricto y que nada es tan fácil como parece en un principio.
Aunque creo que la mayor dificultad está en el desconocimiento de
los protagonistas del comportamiento social y cultural de los
respectivos países.
2
pregunta: Exprese los
sentimientos de la protagonista por su situación en la empresa y
compárelos con los que usted mismo haya experimentado en una
situación semejante.
La
protagonista es un poco “bipolar”, tiene altibajos: a veces le
gusta lo que hace, otras tiene ganas de llorar, otras tiene ganas de
tirarse por la ventana...
Claro
que, teniendo en cuenta como la han tratado ¿Quién no tendría esos
altibajos? Yo me hubiera vuelto loca.
Ameliè
tenía ilusión pero fue vapuleada, humillada, traicionada... La
denigraron a lo más bajo y cuanto más la degradaban más perdía
ella la esperanza y la ambición, cada vez se conformaba con menos.
Hubiera sido feliz si solo la hubiesen tratado como una japonesa más, aunque se hubiera tenido que pasar la vida contando ceros. Solo
quería integrarse a toda costa, pero se lo pusieron exageradamente
difícil.
Críticas
japonesas que he leído afirman que el libro es una total y completa
exageración de la realidad y que la culpa era de ella. Son dos caras
de la misma moneda, uno no sabe a quien creer ¿a la víctima o al
depredador? ¿A caperucita o al lobo? Supongo que hay un poco de
todo, cuando alguien vive eso en sus propias carnes, siempre lo vive
peor que el que lo ve desde fuera, nuestros problemas siempre parecen
peores que los de los demás y siempre parecen peores de lo que en
realidad fueron o son.
Indudablemente, hay que vivirlo para saber lo que sentiríamos y la reacción ante
semejante situación dependería mucho de nuestro carácter y nuestro
temperamento.
En
mi caso, tengo mucho carácter y muy mal temperamento, no me dejo
pisotear fácilmente y hago lo que quiero sin importarme lo que
piensen. Estoy segura de que esa no es una buena actitud para vivir
en Japón y probablemente si viviera la situación de Ameliè no me
hubiese dado para escribir ni una página porque hubiera dimitido el
primer o segundo día. Ya en el primer momento que me hubiesen
mandado escribir una docena de cartas sin darme las indicaciones
específicas de lo que querían y tirarlas todas a la basura me
hubiera cabreado muchísimo y tal vez por orgullo personal hubiese
intentado aguantar otro día más, pero si ya me gritasen como les
gritó Saito y Omochi a Ameliè, dado que no veo correcto gritarle a
un jefe, hubiese presentado mi dimisión irrevocable en ese mismo
instante. Dado que no soy japonesa, no me sentiría indignada por
dimitir porque para mí no es algo indigno y desde luego no afirmaría
que la culpa es mía si creo que no lo es. En definitiva, Ameliè me
parece una persona fuerte y valiente por aguantar todo lo descrito en
el libro y se merece todo mi respeto, pues yo no hubiese aguantado.
Texto
V
1
pregunta: Evoque textos
literarios y productos culturales que traten el choque de culturas y
compártelos con el que se produce en Estupor
y temblores.
El
choque de culturas, Jean
Donaldson: ofrece un punto de vista apasionante sobre la ancestral
relación entre la humanidad y los perros. El trabajo con sus propios
perros y con los de sus clientes, sumado a sus trabajos de
investigación y sus estudios al lado de otros conductistas caninos
la han llevado a la conclusión de que, con casi total seguridad, los
perros aprenden exclusivamente a través del condicionamiento
operante y del condicionamiento clásico.
Escojo
este libro para mostrar que el choque entre culturas no es
exclusivamente humano. Cuando alguien se adentra en la cultura de
adiestrar un animal por primera vez se adentra en un mundo nuevo en
mi opinión equivalente a viajar a otro país.
2
pregunta: Exprese su visión de
la cultura japonesa (o, si prefiere, la oriental en general) en
relación con lo que se refleja en Estupor
y temblores.
Mi
visión sobre la cultura japonesa es completamente diferente. No soy
una entendida sobre la cultura japonesa pero he visto varios animes,
leídos varios mangas, he visto varias películas japonesas y escucho
J-Pop (pop japonés) con frecuencia y nunca tuve una visión tan mala
de Japón como la que me da a entender el libro.
Tal
vez sea porque las cosas han cambiado desde 1991 pero, nunca me
parecieron tan “malos” los japoneses. Sí sé que es una cultura
muy, muy estricta en cuanto a trabajo y estudios, creo que eso es
algo que sabe todo el mundo sin necesidad de saber mucho sobre esta
cultura.
Pero,
ahora mismo, en la actualidad, no creo que las mujeres estén tan
reprimidas como afirma el libro que están. Esa crítica que hace a
que las mujeres son frías, calculadoras y que no pueden tener ni
creatividad, ni sueños, ni pasiones... No puede ser tan cierto, por
lo menos en la actualidad. Claro que, si solo conoció a Fubuki es
normal que piense así, yo pensaría lo mismo. Pero, escuchando a
cantantes como Ayumi Hanasaki o Namie Amuro; o viendo animes como
Elfen Lied (centrado en una mujer); también hay artistas gráficas
como Naizi Ito... Hay cantantes, actrices, dobladoras, diseñadoras,
dibujantes...
Además
hay una especie de amor cortés en algunos animes, las mujeres en
mangas y animes por lo general son más poderosas que los hombres,
normalmente son ellas las que protegen a los hombres y ellos al
sentirse débiles quieren intentar protegerla pero acaban siendo
vencidos y tienen que terminar ellas la batalla. Y muchas veces son
Diosas como en “Dioses de Saint Seiya” o la Reina de los demonios
como en “HighSchool DxD” o la Reina de los vampiros como en
“Dance in the Vampire Bund”, siempre con un cargo superior a los
hombres que deben quedar supeditados al poder de ellas. La mayor
críticas que se les podría hacer a estos animes y mangas es la gran
sexualización de tanto mujeres como niñas, que se les asigna
grandes “atributos” femeninos y excepto en el género “Yuri”,
varias mujeres se pelean por un mismo hombre. En ese aspecto sí son
bastante machistas.
Otra
crítica que les puede hacer es que cuando en alguna de estas series
la mujer se enamora se la trata como una auténtica loca, a veces
incluso psicópata. Y además existen distintos grados o tipos de
locura: Tsundere, Yandere, Kuudere, Dandere...
Pero
en estas mismas series también se trata “mal” a los hombre, que
normalmente son pervertidos (hentai), deshonrosos (Fumeiyona), malos
estudiantes (baka, Warui gakusei) aunque siempre encuentran una mujer
que les hace cambiar y esforzarse para así aprender mucho sobre
magia etc. y poder protegerla o parecer muy listo y gustarle a la
chica que ellos les gusta.
Sí
es verdad lo que el dice el libro de que el suicidio se ve como algo
honorable y llorar como algo terrible porque significa mostrar
debilidad. Pero, en mi opinión esa es una visión que también
existe en occidente aunque en mucha menor medida y, sobre todo, en
adolescentes que ven el suicidio y todo lo que ello conlleva como
algo romántico, y en un tipo de sociedad a la que llamaríamos
“oscura”.
También
he visto y oído historias de mujeres japonesas que sí que se han
tenido que casar por conveniencia y han terminado siendo maltratadas
y es que en Japón la violencia de género se ve ocasionalmente como
algo no solo tolerado, sino incluso parte de la vida común,
trivializado como un problema aislado o simplemente permanece
invisible. Y está violencia se ha hecho cada vez más extensiva no
solo hacia la mujer japonesa sino también hacia mujeres extranjeras
casadas con japoneses, dada la ausencia de leyes eficaces contra la
misma a diferencia de por ejemplo: España.
Lo
último que tendría que añadir es sobre el racismo. Ya que los
japoneses insultan a los occidentales que se sienten atraídos por su
cultura llamándolos “Otakus”, la cual es una palabras que usamos
los propios occidentales para denominarnos a nosotros mismos cuando
nos gusta la cultura japonesa y encontramos personas afines a
nuestros gustos sin darnos cuenta que en realidad en Japón es un
insulto que sería equivalente a decir en occidente “Friki” y es
algo que en Japón está muy mal visto y que se debe ocultar.
En
conclusión, no pretendo basar toda mi visión sobre Japón en todo
lo que veo, leo y oigo sin haber ido al país, y es probable que la
visión de Ameliè se más acertada ya que sí que ha estado en
Japón, pero no creo que pueda basar su visión de una cultura
milenaria en un año trabajando en una empresa en la que tuvo muy
mala suerte y sin a penas salir de esta, o sea puede criticar la
empresa y es algo que no voy a contradecir porque en lo que yo veo,
leo y oigo no se habla precisamente de empresas multinacionales pero,
hay mucha cultura fuera de la empresa que no se puede apreciar en el
libro porque al menos en este libro, en este periodo, ella no la
vive. Y la verdad que si alguien tiene ganas de viajar a Japón,
sobre todo una mujer y se lee este libro sin ver ni leer nada más,
se le quitarían las ganas.
Y
bueno no es lo mismo lo que cuenta una occidental para que lo lean
otros occidentales, que lo que cuenta un japonés para que lo vean
otros japoneses y que casualmente ven algunos occidentales. Son
visiones diferentes.
3
pregunta: Exprese su juicio,
apoyándose en razones y datos del texto, sobre los personajes de la
novela en relación con los puntos de vista que considere más
relevantes (verosimilitud, profundidad, si son representativos o no
de tipos humanos, si están bien trazados o no, si aportan algún
conocimiento sobre el ser humano en general, etc. ).
Fubuki
Mori: representación pura de la traición, los celos, falsedad,
desesperación. Hay una relación casi masoquista entre ella y
Ameliè, a pesar de todo lo que hace Fubuki, de lo mal que la trata,
de que la traiciona, ella sigue admirándola, admira su belleza,
sigue intentando ayudarla, sigue sintiendo pena por ella e incluso se
emociona por recibir esa carta al final, en su lugar yo ni la hubiera
leído, la hubiera tirado a la basura directamente, su actitud a la
vez me sugiere valentía y sumisión; valentía porque la carta
podría contener alguna mala crítica y a pesar de eso la leyó;
sumisión porque a pesar de todo lo que Fubuki hizo y que se estuvo
riendo de ella hasta al final, sigue estando a sus pies e
importándole su opinión. Si yo fuera ella es que ni le dirigiría
la palabra. La escritora la retrata muy bien, sobre todo describe su
físico, su belleza perfecta y describe su situación en la empresa y
la utiliza como crítica a la situación de la mujer japonesa en la
sociedad y en el trabajo.
Omochi:
el más temible de todos, si fuese representado con un pecado, sería
la ira. En la obra es retratado una y otra vez como obeso. Se me
ocurren dos explicaciones por las que Ameliè hace tanto hincapié en
su condición: 1º porque es raro ver ya no a un japonés, sino a un
oriental gordo, no siendo que sea luchador de sumo. Tenemos la
concepción predeterminada de que todo los orientales son delgados, y
no porque no coman o por su dieta basada en arroz, sino porque es su
condición física natural, igual que tenemos asumido que los rubios
de ojos azules son del norte de Europa. 2º porque ella de
adolescente fue anoréxica y probablemente le cause repulsión ver a
gente obesa, pero esto lo digo desde mi propio punto de vista porque
yo fui bulímica y me pasa, así que esta razón es completamente
subjetiva.
Pero
no todo va a ser malo. Como salvador, como amabilidad, tenemos a
Tenshi, ese hombre que salvó a Ameliè de las garras de la
fotocopiadora y de las órdenes absurdas del señor Saito, al menos
durante unas horas. Dio la cara por ella y fue el único que la
valoró como persona y como profesional sin discriminarla por ningún
motivo. En mi opinión, digamos que es el bueno de la película, el
único con el que merecía la pena mantener el contacto.